Hay varias razones para ello juguetes de madera siguen siendo populares a pesar de la disponibilidad de alternativas plásticas y electrónicas. Aquí hay algunas razones:

Natural y sostenible: los juguetes de madera están hechos de materiales naturales y son sostenibles. Son biodegradables y no representan una amenaza para el medio ambiente como los juguetes de plástico, que a menudo se fabrican con recursos no renovables.

Duradero: los juguetes de madera son resistentes y duraderos. Pueden resistir el juego brusco y es menos probable que se rompan que los juguetes de plástico.

Seguro: los juguetes de madera generalmente se consideran más seguros que los juguetes de plástico porque no contienen productos químicos nocivos como ftalatos o bisfenol-A (BPA), que a menudo se encuentran en los juguetes de plástico.

Fomente la creatividad y la imaginación: los juguetes de madera son simples y, a menudo, requieren que los niños usen su imaginación para jugar con ellos. No tienen los sonidos preprogramados ni las luces intermitentes que tienen los juguetes electrónicos, lo que anima a los niños a ser creativos y pensar fuera de la caja.

Educativo: los juguetes de madera también pueden ser educativos. Por ejemplo, los rompecabezas y los bloques de construcción pueden ayudar a desarrollar habilidades de resolución de problemas y conciencia espacial.

Atemporales: los juguetes de madera existen desde hace siglos y tienen un atractivo atemporal. Suelen tener un aire clásico y nostálgico, lo que los convierte en una opción popular para los padres que desean transmitir sus propios juguetes de la infancia a sus hijos.